¿El mejor smartphone de 2023? Hemos analizado el nuevo Galaxy S23 Ultra, lo más top de Samsung para este año.

El Samsung Galaxy S23 Ultra en su nuevo color verde / Imagen: Christian Collado

Que el mercado de los smartphones esté atravesando uno de sus peores momentos de los últimos años no ha impedido a Samsung mantenerse fiel a su cita con el mes de febrero. Un mes que, por definición, es el el de los Galaxy S y que este año nos ha dejado con la generación formada por los Galaxy S23, Galaxy S23+ y, sobre todo, por el Galaxy S23 Ultra.

Ya es la cuarta edición que Samsung repite con su fórmula «Ultra», con el objetivo de construir un teléfono que reúna lo mejor de lo mejor del mercado para ofrecer a los consumidores más exigentes un producto a la altura de sus expectativas. Hasta el modelo del año pasado, la compañía surcoreana había ido perfeccionando su técnica a través de diferentes iteraciones bastante diferentes entre sí, que acabaron culminando en un muy buen Galaxy S22 Ultra.

Este año, por tanto, tocaba refinar la receta. Y así ha sido. El Galaxy S23 Ultra es un smartphone previsible, pues todos sus cambios resultan pasos lógicos teniendo en cuenta lo que ya vimos en el Galaxy S22 Ultra el año pasado. Sin embargo, todas las diferencias presentes en él suman para acabar resultando en un dispositivo que se siente mucho más refinado que cualquier otra generación de la serie Galaxy S hasta la fecha.

+ Pros

  • La mejor pantalla vista en un móvil Android
  • El salto al Snapdragon 8 Gen 2 es lo mejor que ha hecho Samsung en años
  • Sistema de cámaras versátil y de grandísima calidad
  • Autonomía excelente
  • 4 años de actualizaciones del sistema operativo

– Contras

  • Demasiado grande y difícil de manejar con una mano
  • Se echa en falta un modo de calibración de pantalla más preciso
  • OneUI pide un lavado de cara
  • 1400 euros sigue siendo una cantidad difícil de digerir para un móvil

97Sobre 100

Precio del Samsung Galaxy S23 Ultra y dónde comprarlo

El Samsung Galaxy S23 Ultra está disponible para ser reservado en España desde el día 1 de febrero de 2023. Su fecha de lanzamiento al mercado se producirá el día 17 de febrero.

Es posible hacerse con él a través de los principales distribuidores, incluyendo Amazon y la tienda online oficial de la compañía.

Samsung Galaxy S23 Ultra

Ver en Amazon.es:

Samsung Galaxy S23 Ultra

Su precio oficial parte desde 1409 euros en caso de optar por el modelo con 256 GB de almacenamiento interno. La versión de 512 GB de almacenamiento cuesta 1589 euros. También existe una versión con 1 TB de almacenamiento interno por 1829 euros, disponible de forma exclusiva en la tienda oficial de Samsung.

Samsung Galaxy S23 Ultra

En caso de adquirir el dispositivo durante su período de pre-compra en la web oficial de la marca, es posible disfrutar de algunas ventajas adicionales que no están disponibles en otros comercios, como la posibilidad de conseguir el modelo de 512 GB de almacenamiento al precio del modelo inferior, o la posibilidad de adherirse al plan renove que permite entregar un dispositivo antiguo para conseguir un descuento.

Ficha técnica de características

Samsung Galaxy S23 Ultra, ficha técnica
Dimensiones 163,4 x 78,1 x 8,9 mm
Peso 233 gramos
Pantalla 6,8 Pulgadas Dynamic AMOLED 2X, 3080 x 1440 píxeles, Infinity-O Edge-Display, 1-120 Hz, Gorilla Glass Victus 2, HDR10+, 500 ppi
Software Android 13 con Samsung One UI 5.1
CPU Qualcomm Snapdragon 8 Gen2 4nm
RAM 8/12 GB de RAM
Almacenamiento 256/512 GB/1 TB
cámara principal Cámara cuádruple: 200 MP (cámara principal, 85°, f/1.7, 23 mm, OIS);
12 MP (ultra gran angular, 120°, f/2.2, 13 mm);
10 MP (telefoto, 36°, f/2.4, 69 mm, OIS);
10 MP (teleobjetivo, 11°, f/4.9, 230 mm, OIS, zoom óptico de 10x, zoom espacial de 100x)
cámara frontal 12 MP (f/2.2, 80°, 25 mm, HDR10+)
Sensores Acelerómetro, barómetro, sensor de huellas dactilares en pantalla, sensor giroscópico, sensor geomagnético, sensor Hall, sensor de luz, sensor de proximidad, UWB
Conectividad Bluetooth 5.3, USB tipo C, NFC, Wi-Fi 6e
Celular 2G (GPRS/EDGE), 3G (UMTS), 4G (LTE), 5G
Satélites GPS, GLONASS, Beidou, Galileo
Colores Negro, Crema, Verde, Violeta
Otros Resistente al agua según IP68, dual SIM (2x Nano + E-SIM), GPS, reconocimiento facial, 2 altavoces, Dolby Atmos, Wireless PowerShare, DeX, modo niño, seguridad de datos: KNOX, ODE, EAS, MDM, VPN
Batería 5000 mAh, carga rápida de 45 vatios, inalámbrica de 10 vatios
Fecha de salida 1 de febrero de 2023

Diseño

Parte trasera del Samsung Galaxy S23 Ultra en color verde

La estética del Galaxy S23 Ultra apenas ha cambiado con respecto a la de la generación anterior, y los principales cambios se notan al sostener el dispositivo en la mano / Imagen: Christian Collado

A simple vista, los cambios estéticos que aporta el Galaxy S23 Ultra con respecto al modelo del año pasado se pueden contar con los dedos de una mano. Pero la cosa cambia al examinar el dispositivo más de cerca.

Desde el primer momento que pude sostenerlo en las manos, me quedó más que claro el proceso de refinamiento llevado a cabo por Samsung durante la fase de diseño del dispositiv. El cambio más importante está en una reducción notable en la curvatura del chasis de aluminio que recorre los laterales del dispositivo, que hace que los cantos sean más planos.

La sensación a la mano resulta mucho más agradable y facilita el agarre del teléfono de manera considerable. Asimismo, la reduccciópn en la curvatura también ha servido para reducir al mínimo la curvatura del cristal que cubre la pantalla, de modo que ahora es mucho más sutil que en las versiones previas (aunque sigue sin ser totalmente plana como en los Galaxy S23 y S23+).

Por lo demás, el Galaxy S23 Ultra sigue siendo uno de los teléfonos mejor construidos que se pueden encontrar en el mercado. Su parte trasera de vidrio Gorilla Glass Victus 2 cuenta con un acabado mate suave de lo más agradable, que si bien resulta un tanto resbaladizo, es capaz de repeler la suciedad y disimular los arañazos mejor que ningún otro acabado, y el chasis de aluminio pulido otorga al teléfono ese efecto premium tan característico de los móviles más caros del mercado.

Samsung Galaxy S23 Ultra en la mano, color verde

La trasera del Samsung Galaxy S23 Ultra tiene un acabado mate muy agradable al tacto / Imagen: Christian Collado

Si bien la parte trasera disimula bien la suciedad, el hecho de contar con módulos de cámaras separados unos de otros hace que el polvo se acumule en exceso entre los distintos sensores. Teniendo en cuenta que los anillos metálicos que rodean las cámaras están fabricados con el mismo aluminio de los bordes, es probable que la acumulación de polvo y otras pequeñas partículas pueda ser origen de arañazos.

En ese sentido, hay que mencionar que Samsung se muestra especialmente orgullosa de haber empleado una mayor cantidad de materiales reciclados para construir el Galaxy S23 Ultra. Dichos materiales han sido utilizados para dar forma a partes del chasis o del vidrio que encontramos a lo largo de todo su cuerpo, pero la sensación a la mano no cambia con respecto a lo que encontrábamos en modelos anteriores.

Si bien la reducción de la curvatura de los laterales y de la pantalla sirven para mejorar la ergonomía, no se puede rehuir del hecho de que estamos ante un dispositivo grande. Muy grande. Enorme.

Las 6,8 pulgadas de diagonal de la pantalla, las esquinas rectas y el peso de 233 gramos hacen del Galaxy S23 Ultra todo un mastodonte al nivel de modelos como el iPhone 14 Pro Max. No es fácil manejarlo con una sola mano, y probablemente no sea el smartphone más adecuado para los amantes de los móviles compactos. Para ellos, el Galaxy S23 probablemente sea una mejor opción.

Pantalla

Pantalla del Samsung Galaxy S23 Ultra

La pantalla del Galaxy S23 Ultra es excelente, pero se echa en falta una mayor precisión de color / Imagen: Christian Collado

Durante años hemos visto cómo la serie Galaxy S aterrizaba en el mercado a principios de año para dejar claro quién manda en el terreno de las pantallas, y dejar en evidencia el trabajo realizado por el resto de fabricantes. Este año, la cosa cambia.

La pantalla del Samsung Galaxy S23 Ultra es idéntica a la del Galaxy S22 Ultra. Lo cual no es malo: sigue siendo, probablemente, la mejor pantalla que se haya visto en un smartphone Android hasta el momento, con una nitidez excepcional, buenos niveles de brillo y un contraste inmejorable. Pero no es perfecta.

Mientras Apple demostraba en septiembre del año pasado como su iPhone 14 Pro Max podía alcanzar los 2000 nits de brillo máximo en exteriores, Samsung sigue anclada en los mismos 1750 nits del año pasado, de modo que la brecha con respecto a los modelos de referencia de otros fabricantes Android se va reduciendo cada vez más, y la ventaja de Samsung es cada vez menor.

Siendo sinceros, la diferencia en el día a día es ínfima. Pero no hay que olvidar que estamos ante el smartphone de referencia de Samsung. El que debería mirar de tú a tú al mejor iPhone del mercado y superarlo en este tipo de apartados. Más aún, cuando la propia Samsung es la encargada de fabricar la pantalla que monta el smartphone de Apple.

Por otro lado, el Galaxy S23 Ultra sigue arrastrando uno de los inconvenientes típicos de los modelos de la serie Galaxy S: una calibración de colores un tanto… peculiar.

Por defecto, el Galaxy S23 Ultra cuenta con el modo de color «Intenso» activado por defecto. Dicho modo satura en exceso los colores, lo cual hace que la pantalla resulte extremadamente llamativa, pero con unos tonos muy poco cercanos a la realidad.

La solución es tan fácil como cambiar el modo de color de pantalla. Pero hay un problema: como alternativa, Samsung ofrece el modo «Natural», que toma el camino diametralmente opuesto al modo «Intenso» y reduce la intensidad de los colores al mínimo para adecuarse al espectro de color sRGB, hasta dejarlos demasiado apagados y planos.

En este sentido, pienso que Samsung debería aprender de Google y su Pixel 7 Pro o de la propia Apple, y comenzar a ofrecer un modo que se adecúe a los estándares de color actuales con el que poder demostrar las capacidades de sus excelentes paneles.

Por otro lado, he de mencionar que Samsung ha mejorado de manera notable los ángulos de visión del panel, y el tinte azul tan característico de las generaciones previas es mucho menos apreciable, a pesar de no haber desaparecido por completo.

Tras la (casi) excelente pantalla del Galaxy S23 Ultra encontramos varios detalles que merecen una mención. Por un lado, está el lector de huellas dactilares ultrasónico, para el que Samsung ha empleado una nueva generación de esta tecnología, con el objetivo de mejorar la precisión y la velocidad del lector.

Su funcionamiento, efectivamente, es mejor al del año pasado, si bien la diferencia es difícil de apreciar. Sigue siendo el lector más rápido del mercado, si bien encontrar el punto exacto en el que el lector es capaz de leer nuestra huella puede resultar un tanto complicado las primeras veces. Para el futuro, confiamos que Samsung comience a implementar sensores con un área de lectura mayor.

También está el motor háptico integrado en el dispositivo, capaz de generar vibraciones firmes, agradables y precisas para complementar la experiencia con el software del dispositivo. Sigue sin tener el mejor motor de vibración (ese mérito, de momento, es del OnePlus 11 y del iPhone 14 Pro), pero está cerca.

Hardware y rendimiento

Samsung Galaxy S23 Ultra verde

Una versión mejorada del Snapdragon 8 Gen 2 se esconde en el interior del Galaxy S23 Ultra / Imagen: Christian Collado

Si tuviera que quedarme con una característica del Galaxy S23 Ultra no sería su pantalla, su diseño ni su cámara: sería su procesador. No solo por su potencia o el rendimiento que puede ofrecer, sino por lo que supone para la historia de la serie Galaxy S.

Y es que, al fin, Samsung ha escuchado nuestras plegarias y ha incorporado un chip de Qualcomm en su modelo más avanzado. Es el Snapdragon 8 Gen 2, pero no uno cualquiera.

Qualcomm y Samsung han trabajado en conjunto para desarrollar una versión optimizada de su mejor procesador hasta la fecha, bautizado Snapdragon 8 Gen 2 Mobile Platform for Galaxy, que aumenta la frecuencia máxima de GPU y CPU a la vez que introduce algunas optimizaciones orientadas al procesado de imagen.

Por lo demás, sigue siendo el mismo chip fabricado en formato TSMC de 4 nanómetros con ocho núcleos, dos de ellos basados en arquitectura ARM Cortex-X2 enfocados al alto rendimiento, en este caso capaces de alcanzar los 3,36 GHz. La GPU también es la misma Adreno 740 presente en el resto de móviles basados en la plataforma Snapdragon 8 Gen 2.

El chip es todo un devorador de benchmarks, capaz de producir las mejores puntuaciones que hayamos obtenido con un smartphone Android hasta la fecha, junto a las de modelos como el OnePlus 11 o el RedMagic 8 Pro de Nubia. Pero, ¿qué hay del uso cotidiano?.

Pues que el Samsung Galaxy S23 Ultra vuela, sin más. La fluidez a la hora de llevar a cabo cualquier tipo de tarea es extrema, y la estabilidad del sistema no la encontrábamos en ningún smartphone de la serie Galaxy S con chip Exynos. La eficiencia del procesador Snapdragon también queda demostrada, así como su capacidad de mantener un buen rendimiento sostenido a pesar de las fluctuaciones de temperatura.

Aunque existe una forma de mejorarlo incluso más. El hecho de contar con una versión «overclockeada» del Qualcomm Snapdragon 8 Gen 2 hace que el Galaxy S23 Ultra no sea todo lo eficiente que podría llegar a ser. Por suerte, Samsung incluye en los opciones de batería una función que permite reducir ligeramente la frecuencia máxima de reloj a la que el núcleo principal del procesador puede llegar.

Activando dicho modo, la potencia bruta del dispositivo se reduce en alrededor de un 10%, pero las mejoras de eficiencia y consumo de energía pueden suponer hasta un 50. Una diferencia notable, que no tiene un impacto notable en el rendimiento del dispositivo.

Durante estos últimos días de prueba, he mantenido esta opción activada en mi Samsung Galaxy S23 Ultra, y he de decir que no he notado falta de velocidad en ningún momento, incluso haciendo un uso intenso del dispositivo (además, este «modo ligero» se desactiva automáticamente a la hora de jugar), pero sí he apreciado una mejor autonomía.

Software y experiencia

OneUI 5.1 es la versión que corre por el interior del Galaxy S23 Ultra. Está basada en Android 13, e introduce algunos cambios menores con respecto a la versión anterior.

Samsung, además, promete un mínimo de cuatro grandes actualizaciones del sistema operativo, y actualizaciones de seguridad durante cinco años, convirtiéndose así en la firma con el soporte más amplio que se puede encontrar en el universo Android. Además, con el despliegue de Android 13 ha quedado demostrado que, hoy por hoy, es la compañía más eficaz a la hora de llevar nuevas versiones del sistema operativo a sus dispositivos, independientemente de su gama.

Sobre OneUI hay mucho que contar. Tanto, que necesitarías varias horas para poder terminar de leer este análisis. Es el software más funcional, práctico y completo que se puede encontrar en el panorama Android en la actualidad. Existen funciones, opciones, añadidos y herramientas de todo tipo, ajustes de personalización para todos los gustos (y eso sin entrar a hablar de las opciones que habilitan apps como Good Lock y todos sus diferentes módulos).

Pero (siempre hay un pero) Samsung parece haber dejado relegado en un segundo plano el sentido de la estética. OneUI se siente una capa un tanto anticuada a nivel visual, no tan elegante ni refinada como lo que Google ofrece en sus Pixel con las últimas versiones de Android.

Dejando a un lado lo subjetivo del diseño, hay decisiones cuestionables a nivel estético, como el hecho de mezclar iconos tematizados con iconos originales en el cajón de aplicaciones del launcher, o que la paleta de colores generada automáticamente a partir del fondo de pantalla no muestre una combinación de tonos tan armoniosa como la que ofrecen los Pixel con Material You. Son pequeños detalles, sin duda, pero si a un dispositivo podemos pedirle un extra de mimo en este tipo de aspectos, es al más caro del panorama Android.

El aspecto visual no es la única pega. Samsung continúa haciendo caso omiso de las imposiciones de Google, y por alguna razón, ha decidido no incluir el sistema de actualizaciones A/B en la serie Galaxy S23. Este sistema permite revertir cambios fácilmente en caso de que una actualización no vaya como debería y cause problemas, a la vez que permite actualizar el sistema operativo de fondo, sin dejar inutilizado el dispositivo durante varios minutos.

El Samsung Galaxy S23 esconde otro as bajo la manga que no encontraremos en ningún otro smartphone del mercado: el S-Pen. Por segundo año consecutivo, Samsung ha optado por integrar el stylus en el interior de su smartphone insisgnia, dando a los power users y amantes de la productividad una razón más para apostar por este modelo.

Sus funciones son prácticamente idénticas a las del modelo del año pasado. Y, aunque Samsung nos aseguró que la respuesta táctil del lápiz ha sido mejorada ligeramente, la realidad es que la experiencia no ha variado.

Seguimos contando con las mismas herramientas, que permiten tomar notas, hacer recortes, seleccionar, dibujar o traducir textos. Entiendo que el S-Pen tiene su público, y que por más de 1400 euros, aporta un valor añadido interesante. No obstante, en mi experiencia con modelos de la serie Galaxy Note y Galaxy S, los únicos momentos en los que saco partido de este accesorio es a la hora de editar fotografías en la pantalla del móvil usando herramientas como Adobe Lightroom.

S Pen del Galaxy S23 Ultra

El S Pen, aliado de los «powers users», usuarios creativos y amantes de la productividad, vuelve a estar integrado en el Galaxy S23 Ultra / Imagen: Christian Collado

Batería y carga

Hacía mucho tiempo que un smartphone Android no me dejaba tan satisfecho en lo que respecta a la autonomía como el Galaxy S23 Ultra. La combinación de los 5000 mAh de capacidad con la mayor eficiencia del Snapdragon 8 Gen 2 resulta en una excelente autonomía, que permite superar la jornada de uso sin demasiados problemas, pudiendo alcanzar cifras cercanas a las siete horas de pantalla encendida con un uso intenso del teléfono.

Dandole un uso más ligero, el Galaxy S23 Ultra parece no tener fin. Y cuando llega el momento de pasar por el enchufe, es posible utilizar un cargador compatible con la tecnología USB Power Delivery (no viene incluido en la caja) para aprovechar los 45 W de potencia que admite. También se incluye soporte para carga inalámbrica con una potencia de hasta 10 W, y carga inalámbrica inversa.

Cámaras

Cámaras del Samsung Galaxy S23 Ultra

La cuádruple cámara trasera del Samsung Galaxy S23 Ultra, liderada por el nuevo sensor ISOCELL HP1 de 200 megapíxeles / Imagen: Christian Collado

Samsung lleva varios años intentando dar con la fórmula definitiva a la hora de diseñar el sistema de cámaras de sus dispositivos de referencia. Con el Galaxy S20 Ultra, apostó por un sensor principal de 108 megapíxeles que no logró ofrecer los resultados esperados. Un año más tarde, mejoró la receta con un Galaxy S21 Ultra mucho más convincente, pero que todavía no alcanzaba el ivel que cabría esperar de un smartphone de su categoría.

El Samsung Galaxy S22 Ultra fue el modelo que lo cambió todo. Aunque arrastraba algunos de los problemas, en su mayoría relacionados con el procesado de imagen, quedaba claro que la compañía al fin había logrado exprimir todo el juego al sensor de 108 megapíxeles que venía empleando desde hace un par de generaciones.

Este año, la marca apuesta por un sensor completamente diferente como encargado de liderar su sistema de cámaras más ambicioso hasta la fecha. Conocido como ISOCELL HP2, el sensor principal del Galaxy S23 Ultra destaca por ser el primero utilizado por la compañía en alcanzar los 200 megapíxeles de resolución. Así queda el conjunto de cámaras que incorpora el nuevo flagship coreano:

  • Cámara principal: ISOCELL HP1 de 200 megapíxeles. Tamaño de 1/1,3″, píxeles de 0,6 µm, apertura f/1,7 autoenfoque por detección de fase, estabilización óptica de imagen, distancia focal equivalente a 23 mm
  • Cámara Ultra Gran Angular: 12 megapíxeles, tamaño de 1/2.55″, píxeles de 1,4 µm, apertura f/2,2, ángulo de visión de 120˚, Dual Pixel PDAF, distancia focal equivalente a 13 mm
  • Teleobjetivo de 3 aumentos: 10 megapíxeles, tamaño de 1/3,52″, píxeles de 1,12 µm, apertura f/2,4, Dual Pixel PDAF, estabilización óptica de imagen, zoom óptico de tres aumentos, distancia focal equivalente a 70 mm
  • Teleobjetivo de 10 aumentos: 10 megapíxeles, tamaño de 1/3,52″, píxeles de 1,12 µm, apertura f/4,9 Dual Pixel PDAF, estabilización óptica de imagen, zoom óptico de tres aumentos, distancia focal equivalente a 70 mm
  • Cámara delantera: 12 megapíxeles, apertura f/2.2, distancia focal equivalente a 26 mm

Sobre el papel, el principal cambio se encuentra en el sensor principal, que aumenta drásticamente su resolución, además de emplear una cámara completamente nueva. No obstante, también hay otras diferencias importantes con respecto a la generación previa, como el uso de una cámara delantera de menor resolución, que pasa de 40 a 12 megapíxeles.

Sobre el apartado fotográfico del Galaxy S23 Ultra hay mucho de lo que hablar. Y no todo ello es bueno. Comencemos por lo más elemental: la aplicación de cámara.

Su interfaz no ha cambiado demasiado con respecto a lo que ya conocemos de versiones anteriores de OneUI. Contamos con un carrusel de modos en la parte inferior, acceso directo a los diferentes sensores, y una barra de herramientas superior desde la que modificar ciertos parámetros, como el tamaño de las imágenes.

El carrusel de modos es personalizable, y como novedad, por primera vez se ha incluido acceso directo a la aplicación Expert RAW (que eso sí, no viene preinstalada y es necesario descargarla previamente desde la Galaxy Store), de modo que quede más accesible de cara a todos aquellos usuarios que quieren aprovechar más a fondo las capacidades de las cámaras del dispositivo.

Un detalle que se echa en falta en la app de cámara de Samsung viendo lo que ya han logrado Apple y Google, es que la previsualización se muestre con HDR en tiempo real. Modelos como el Galaxy S23 Ultra tienen potencia computacional más que de sobra para llevarlo a cabo, y es un añadido de lo más práctico y conveniente, dado que permite poder ver una imagen casi definitiva en la ventana de previsualización, sin tener que esperar a capturar la foto y que la cámara la procese.

La app de cámara es sencilla, intuitiva y rápida. Pero tiene un problema: por defecto, Samsung hace que la cámara del dispositivo no capture la foto hasta que se levanta el dedo del botón de captura, lo cual causa que haya cierta sensación de lag a la hora de hacer fotos. Como es lógico teniendo en cuenta las características del dispositivo, no se debe a una falta de potencia, ni tampoco de opimización. Es una mera decisión de diseño, que, más sorprendente aún, se puede eliminar simplemente descargando una aplicación ofrecida por la propia Samsung.

A través del módulo Camera Assistant de la suite de personalización Good Lock, es posible activar una opción llamada «Botón cámara rápido» , que cambia el funcionamiento de la app de cámara para que el dispositivo saque la foto en el momento en que se toca el botón de cámara, y no cuando el dedo se levanta de la pantalla. La diferencia entre mantener esta opción activada o desactivada es abismal, y no entiendo por qué razón Samsung decide mantenerla desactivada.

Veamos, ahora sí, qué tal saca las fotos este Samsung Galaxy S23 Ultra. Y, de nuevo, tenemos buenas y malas noticias.

Si usamos la cámara en modo 100% automático, sin cambiar ningún ajuste, veremos que el sensor principal captura imágenes de 12,5 megapíxeles por defecto, gracias a la técnica de agrupado de píxeles. La manera de procesar las imágenes sigue siendo «muy Samsung». Esto es: colores saturados, mucha nitidez y un balance de blancos tirando a cálido, con el objetivo de hacer las imágenes más llamativas y perfectas para ser compartidas en redes sociales sin necesidad de edición posterior.

Este año, eso sí, Samsung ha afinado el software con el objetivo de dar a las fotografías un extra de contraste, del mismo modo que Google y Apple han venido haciendo en los últimos años.

Los resultados son muy buenos, pero no perfectos. Sobre todo, cuando vemos de lo que realmente es capaz la cámara del Galaxy S23 Ultra.

El rango dinámico de la cámara principal es uno de los más amplios que hemos probado hasta la fecha, y hace que la cámara se comporte bien incluso en las escenas más complicadas a nivel de iluminación. También es bueno el nivel de detalle capturado, incluso en escenas nocturnas (no podíamos esperar menos de un sensor de tal resolución).

El mayor problema de este sistema de cámaras es exactamente el mismo que ya nos hemos encontrado en dispositivos como los Pixel 7 y 7 Pro: el software que procesa las capturas no está al nivel de los sensores.

Comparando imágenes capturadas en modo automático con los archivos RAW generados al emplear el modo «Pro» incluido en la cámara, nos encontramos con un exceso de nitidez artificial muy notable en las fotografías procesadas, así como unos tonos de piel poco realistas y demasiado suavizados.

Cuando tomamos los archivos RAW la cosa cambia, y mucho. Las imágenes en bruto tienen un look mucho más natural y cercano a lo que se podría obtener con una cámara profesional, y como es lógico, ofrecen un mayor margen de maniobra a la hora de editar las fotografías aprovechando toda la información capturada por el sensor.

Claro que, no todos los usuarios estarán dispuestos a invertir el tiempo y esfuerzo necesario en procesar las capturas a través de herramientas como Lightroom. En ese caso, una buena idea puede ser recurrir a Expert RAW y su modo de 50 megapíxeles, que si bien sigue empleando los diferentes algoritmos de procesado de imagen del modo automático, los combina con el archivo RAW para acabar consiguiendo imágenes más equilibradas.

Por otro lado, está el modo de 200 megapíxeles. Usar este añadido tiene sus ventajas e inconvenientes. La mayor ventaja es la mayor captura de detalle, dado que el procesado no es tan agresivo al tener que procesar un archivo tan grande que fácilmente puede superar los 30 MB de tamaño. El problema, como es lógico, está en el tiempo necesario para capturar y procesar las imágenes, mucho más elevado que al usar el modo automático o RAW.

Los sensores adicionales también ofrecen buenos resultados, pero sin duda los dos telefotos son los más divertidos de utilizar. Ambos se benefician de las mejoras en el procesado de las que hablaba antes, para otorgar al sistema de cámaras una versatilidad y calidad de imagen nunca antes vista. Mención especial se merecen el telefoto de tres aumentos a la hora de capturar retratos, y el de diez aumentos a la hora de ir todavía más allá, y ser capaz de capturar imágenes nítidas incluso al alcanzar los treinta aumentos.

La cámara de 12 megapíxeles asociada a la lente ultra gran angular es la más floja del conjunto de sensores que integra el S23 Ultra. Las imágenes que produce no son malas, ni mucho menos, pero no da tanto juego como el resto de cámaras.

Finalmente, el nuevo sensor de 12 megapíxeles delantero también se beneficia de las mejoras a nivel de procesado, para ofrecer una muy buena experiencia a la hora de capturar selfis. Hay que mencionar, además, que Samsung ha trabajado junto a TikTok, Insagram y Snapchat para mejorar la integración de la cámara y los diferentes modos (incluyendo las mejoras relacionadas con la fotografía nocturna).

La grabación de vídeo vuelve a ser uno de los puntos fuertes de la familia Galaxy S, y el modelo Ultra es el que más despunta en este sentido al incorporar un nuevo sistema de estabilización óptica dotado de un mayor rango de movimiento. Los resultados al activar el modo «superestable» resultan sorprendentes, y sin duda alguna estamos ante el smartphone Android con la mejor calidad de vídeo que se puede encontrar en la actualidad.

Galería de Fotos y vídeos con Samsung Galaxy S23 Ultra

Mejores alternativas al Samsung Galaxy S23 Ultra

Hoy por hoy, solo existe un smartphone capaz de competir con el Samsung Galaxy S23 Ultra en el mercado global.

El iPhone 14 Pro Max de Apple es el único dispositivo que, como el Galaxy S23 Ultra, aspira a conquistar el segmento más premium del mercado, ese donde solo los fabricantes que dominan el mercado se atreven a competir.

Lo verdaderamente complicado no es elegir entre un modelo u otro: ambos smartphones cuentan con las mejores especificaciones, sistemas de cámara de primer nivel, autonomías asombrosas y diseños refinados. En realidad, todo se reduce al terreno del software, pues quienes ya se encuentren inmersos en el ecosistema Apple quizá tengan más motivos para no salir de él que para hacerlo, y aquellos que tengan una mayor flexibilidad, probablemente vean al Galaxy S23 Ultra como una opción más atractiva.

Conclusión

Haciendo una foto con Galaxy S23 Ultra

El Samsung Galaxy S23 Ultra es el mejor smartphone Android de 2023 hasta ahora / Imagen: Christian Collado

El proceso de refinamiento en el que Samsung ha estado inmersa con su serie Galaxy S a lo largo de los últimos años ha surtido efecto. El Galaxy S23 Ultra es el mejor smartphone de la compañía hasta la fecha, y el teléfono más completo, equilibrado y versátil que se puede encontrar en el mercado en 2023.

Samsung Galaxy S23 Ultra, análisis: previsible, poderoso, perfeccionadoSamsung Galaxy S23

Marca Samsung Nombre Alternativo Galaxy S23 Fecha de lanzamiento 17-02-2023 Precio 959 €

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Autor: Christian Collado