Estamos ante uno de los inventos más peculiares del momento
La irrupción de GPT-4 el año pasado cambió para siempre el paradigma de lo que entendíamos como Inteligencia Artificial. En aquel momento, no nos imaginábamos la grandísima aceptación que iba a tener y, sobre todo, la importancia que se le iba a dar a la IA de cara al futuro. Con el objetivo de hacer más humanas a las IA han ido surgiendo gadgets y nuevos dispositivos para tal fin. Hoy os hablamos de uno en concreto que acaba de surgir y que busca darle cara a las IA.
Así es WeHead y su disparatado coste
WeHead era una aplicación para hacer videollamadas y_meetings_ de una forma un tanto peculiar: a través de una pantalla con distintas profundidades que daba una sensación de que el rostro de la videollamada se desplegaba en tres dimensiones ante nosotros. Ahora, tal y como muestra su página web han anunciado la que se conoce como WeHead GPT-Edition, en la que le podemos poner cara finalmente a nuestra inteligencia artificial que nos sirve como principal apoyo en forma de asistente.
Se han presentado distintas skins para ponerle cara a nuestra IA. Una de ellas es un rostro multicolor hecha de partículas que recuerdan a la arena. Este es el menos «humano» de todos ellos, mientras que también atendemos a otro tipo de pieles para nuestra IA que incluyen personalidades y y rostros muy diferenciados.
Estos avatares totalmente diferentes nos permiten hacer más humanas las conversaciones. Pero lo cierto es que parece que es una tecnología a la que todavía le falta mucho por avanzar y que podría generar una cierta incomodidad a todos aquellos que quieran tener una IA con rostro funcional.
Además, no es especialmente barato, como ya se ha comentado con anterioridad, su precio es, ni más ni menos, que de 5.000 dólares. Esto es una cantidad bastante elevada para un producto con unas funciones bastante limitadas.
En resumidas cuentas:
- WeHead era una aplicación para hacer videollamadas.
- Ahora, también sirve para alojar una IA en su interior que reacciones como si fuera un humano.
- Así, podríamos ponerle cara a nuestra IA.
- Su precio, es bastante elevado y no parece especialmente práctico.
El valle de lo inquietante
Lo cierto es que hay algo que va realmente mal en todos estos proyectos. Y llegados a este punto, entra a la ecuación el Valle de lo inquietante. Este término ha sido acuñado con un propósito muy claro: explicar la sensación de inquietud que genera en los humanos cuando ven algo que parece humano pero que no lo es. Nuestro cerebro, inevitablemente, ve que algo está funcionando mal en eso que aparentemente es humano, y genera una sensación como de incomodidad dentro de nosotros que provoca rechazo.
Este fenómeno no ocurre exclusivamente con este producto. Sino que sucede también con otros como Ameca, el robot humanoide más avanzado, que es capaz de hacer gestos y movimientos muy humanos pero siempre da la sensación de que algo está fallando ahí. Cuanto menos realista es ese humano, más inquietud genera, por lo que es posible que en algún momento se logre evitar esa sensación gracias al poderoso avance de la robótica y la IA.
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Autor: Esteban García Marcos