Carlos Moura

Toshiba ha confirmado que ha recibido una oferta, por valor de alrededor de 15.000 millones de dólares, que además de convertir la empresa en privada es posible que sea el primer paso para terminar con los problemas que ha tenido debido a su situación económica, así como a varios escándalos, que se han ido sucediendo a lo largo de los últimos años.

El grupo inversor que ha hecho la oferta, el japonés JIP a través de su filial JMBH, realizó una primera a principios de este año, que en Toshiba consideraron demasiado baja. Desde entonces, la Junta Directiva de Toshiba y JIP han estado negociando para que esta última subiese el precio que estaban dispuestos a pagar por cada una de sus acciones. Fruto de estas negociaciones, el precio que pagarán por cada uno de los títulos de la compañía será 0,07 dólares mayor que en la oferta inicial. Finalmente, abonarán 32,27 dólares por cada una.

Eso sí, para que la oferta se haga efectiva, tienen que dar su consentimiento para ello al menos dos tercios de los accionistas de Toshiba. Estos tendrán, como no podía ser de otra manera, que vender sus títulos a JIP, que con su oferta situará la valoración de Toshiba en 13.970 millones de dólares. Según el Presidente de la Junta Directiva de la empresa, Akihiro Watanabe, el día de la oferta «marca un punto de inflexión para Toshiba. La empresa está saliendo de un túnel después de ocho años«.

A juzgar por el optimismo de Watanabe, la oferta tiene bastantes posibilidades de prosperar, y en caso de ser así, sus directivos esperan que pueda servir para acabar y dar la vuelta a varios de los problemas que ha sufrido el grupo en los últimos años.

Entre ellos están las consecuencias de los problemas en la planificación de la construcción de dos plantas nucleares en EEUU, así como el desastre de Fukushima. Todo esto que jugó un papel fundamental en la caída y bancarrota de su división de energía nuclear. Esto, sumado a diversos problemas con la contabilidad y gobernanza de Toshiba, han sumido a la compañía en una crisis bastante notable.

El posible éxito de esta oferta, que será firme hasta el 20 de septiembre, se debe también al posible acuerdo entre Kioxia y Western Digital, que puede anunciarse oficialmente en cuestión de semanas. En la actualidad, Toshiba es propietaria de un 40% de las acciones de Kioxia, empresa dedicada al desarrollo de componentes para memoria y almacenamiento.